viernes, 26 de abril de 2013

Diálogo entre Luz y Arquitectura


Diálogo entre Luz y Arquitectura.
Isaac Puertas
Lighting Designer

¿Qué es la luz?
Podemos definirla como la energía que nos permite ver el espacio que habitamos. Esto nos lleva a tener en cuenta dos efectos:
·      Por un lado uno de tipo práctico, la luz nos permite actuar y desarrollar diferentes actividades en dichos espacios.
·      Otro de tipo estético, la luz imprime al espacio un aspecto visual. Ambos efectos nos llevan a contemplar la función práctica y estética de la luz.
El diseñador de iluminación debe buscar el equilibrio de ambos aspectos a la hora de afrontar un proyecto.
La evolución de la iluminación arquitectural se ha debido, por un lado al desarrollo tecnológico, aspecto estudiado por la luminotecnia y por otro a los tratamientos expresivos de la luz, analizado por la luminoplastia.
Para definir la iluminación nos basaremos en el análisis de una espacialidad arquitectónica, que está en función de planos y o volúmenes (suelos, paredes, techos), sus manifestaciones materiales (color, textura) y a la propia función que cumple dicha espacialidad (tipología arquitectónica).
La luz y el espacio son elementos que podemos relacionar dialécticamente; así la espacialidad podemos considerarla como el resultado de la interacción de la luz y el espacio.
En la mayoría de proyectos arquitectónicos intervienen tanto la luz natural como la artificial, pero vamos a centrarnos en esta última.
Por un lado, la morfología de la luz nos permite definir el espacio en términos de visualidad estética mediante sus factores morfológicos; cada uno de lo cuales tiene una función en la composición visual: con la posición obtenemos diferentes modos de claroscuro; con la intensidad creamos contrastes y centros de atención; con el color provocaremos sensaciones, estados de ánimo; con la difusión descubriremos texturas, y con el tamaño definimos la proporción del espacio iluminado.
En los diseños de iluminación elaborados es frecuente crear diferentes estados de iluminación (escenas) de modo que la luz se adapte a diferentes necesidades de uso, para ello nos serviremos de los distintos sistemas de control.
El diseño de iluminación es el resultado de un proceso y en éste intervienen la finalidad, que nos impone condiciones de trabajo y la creatividad, que nos permite libertad; de esta manera consideraremos el diseño de iluminación como un constante diálogo entre el resultado esperado y el proceso creativo.
Podemos resumir el proceso de diseño de iluminación en tres pasos:
Recopilación de información; aquí se determina que tipo de espacialidad debemos iluminar, tipos de materiales que la componen, así como necesidades funcionales que deben cumplirse.
Elaboración del concepto de diseño; es decir el concepto de iluminación en términos de morfología de la luz, que nos dará el equilibrio entre lo funcional y lo expresivo.
Tecnología; nos permitirá la manifestación correcta del concepto de iluminación; la aplicación técnica en la espacialidad.
Aplicando estos principios e ideas conseguiremos un óptimo resultado en el diseño de iluminación aunando luz y arquitectura.

No hay comentarios:

Publicar un comentario